Fauna
Los auténticos dueños de estas tierras vuelan, corren y se ocultan en ellas.
La situación del castillo de Sobroso es excelente, en lo alto de monte de Landín y custodiado por un gran parque forestal. En este cuidado entorno y gracias a la reforestación llevada a cabo por la Diputación de Pontevedra se ha creado un oasis con alimento y refugio para muchos animales.
Reptiles, insectos, aves y mamíferos se han instalado en este bosque atlántico, formando ya parte del paisaje. Por eso queremos presentaros a algunos de nuestros vecinos y pediros que, cuando visitéis Sobroso, nos ayudéis a conservar y mantener limpio su hogar.
Una guía de campo, unos prismáticos o una lupa pueden ser los complementos perfectos para la visita a nuestra senda. En cualquier época del año podemos ver fauna silvestre en la finca, si bien en invierno los reptiles y mariposas realizan un corto letargo invernal, a partir del mes de febrero y hasta noviembre ya es posible verlas aprovechando los días soleados. En un bosque caducifolio como este, el invierno tiene una ventaja; localizar pájaros a simple vista es más sencillo cuando no hay hojas que los oculten.
AVES
Algunos pájaros como el mirlo o el petirrojo son sencillos de observar, otros, sin embargo, requieren de más paciencia. No siempre los veremos, pero su canto nos acompaña en nuestro paseo por la finca. Conviene tener en cuenta que habrá más posibilidades de encontrarlos cuanto más en silencio nos movamos.
En la imagen superior puedes ver un macho de pinzón vulgar ( Fringilla coelebs), un habitual visitante de nuestra finca que podemos sorprender patrullando el suelo en busca de comida. Su canto es muy potente y suele encontrar el mejor escenario para emitirlo, aquí lo vemos sobre el lampión del hórreo.
Para localizar aves más pequeñas e inquietas como el verdecillo, el reyezuelo o el herrerillo es importante prestar atención a los sonidos. Los garrapinos (Periparus ater) se mueven constantemente por las ramas como auténticos equilibristas. El chochín ( Troglodytes troglodytes) es una de las aves más pequeñas de Europa y, al igual que al pinzón, le gusta emitir su canto desde un posadero alto. El reyezuelo (Regulus ignicapilla), por su parte, es también un ave de poca envergadura, pero que llama la atención por su colorida cresta.
Las patas, picos y ojos nos cuentan mucho sobre el medio de vida de las aves y, por tanto, nos dan pistas sobre la familia y género al que pertenecen. El arrendajo (Garrulus glandarius) es un hermoso córvido que llama la atención por el contraste de colores de su plumaje blanco, pardo, azul negro y grisáceo. Tiene predilección por las bellotas, por eso le encanta el bosque de Sobroso. Resulta un gran aliado en la reforestación, pues tiene por costumbre enterrar los frutos, colaborando en la dispersión de semillas y la extensión de los robles plantados por la diputación de Pontevedra. Normalmente es tímido y desconfiado, el sonido de sus reclamos no puede considerarse canto, pero sí que es un animal comunicativo, capaz incluso de imitar las voces de otras aves.
El mirlo (Turdus merula) es muy madrugador, de las primeras aves en cantar cada día. Su identificación no tiene secretos, estamos ante un ave muy familiar, no sorprende verlo corriendo o dando saltos por el parque en busca de comida. Generalmente son algo confiados, pero manteniendo una distancia prudencial. Se esconderá rápidamente si se le molesta o se siente amenazado y, cuando se asusta grita, avisando del posible peligro a las aves de los alrededores.
REPTILES
Las pequeñas lagartijas son compañeras habituales, muy fáciles de observar tomando el sol en las murallas los meses de primavera y verano. En ocasiones encontramos alguna sin cola; los lagartos, lagartijas y luciones pueden desprenderse de ella si se sienten amenazados. Ésta permanece en movimiento actuando como reclamo y despistando a sus depredadores. Así ganan tiempo para huir a cambio de perder sólo una parte del cuerpo que, además, pueden regenerar.
Algunas personas pueden sorprenderse por el tamaño de los lagartos ocelados (Timon lepidus), que llegan a medir hasta 20-25 cm de cabeza a tronco. Son unos reptiles inofensivos y hermosos, con unas características manchas azuladas en ocelos negros.
En las inmediaciones del castillo se ha observado a la lagartija colilarga (Psammodromus algirus), muy fácil de distinguir en este caso pues los machos adultos adquieren, en primavera, una tonalidad muy llamativa de color anaranjado.
MARIPOSAS
Las mariposas son insectos elegantes y hermosos que, además, juegan un papel muy importante pues ayudan a la polinización. La colección de frutales autóctonos de Sobroso depende de estos animales para producir las apetitosas peras y manzanas de origen local.
Resulta muy interesante aprender curiosidades sobre estas extraordinarias criaturas mientras disfrutamos con su observación. ¿Sabías que sus alas están cubiertas de escamas? Sin duda el transcurso de su vida es fascinante, por su metamorfosis y también por su importante valor científico como bioindicador. En las imágenes te mostramos a la mariposa conocida como blanca de la col (Pieris brassicae), la curiosa limonera (Gonepteryx rhamni), cuyas alas recuerdan la forma de las hojas, mostrando la habilidad de los lepidópteros para mimetizarse con el entorno cuando pliegan sus alas. La tercera seguro que la has visto muchas veces, es la Vanessa atalanta, una mariposa migradora.
También es muy conocida podalirio ibérica (Iphiclides feisthamelii). Revolotea alrededor del castillo luciendo su estampado cebra y su cola de golondrina. En la foto inferior se aprecian los “ojos azules” en sus alas inferiores.
A la mariposa saltacercas (Lasiommata megera) la fotografiamos haciendo honor a su nombre; buscaba sol y alimento mientras saltaba sobre las murallas. La doncella de ondas rojas (Euphydryas aurinia) fue vista mostrando sus elegantes alas en la senda que discurre por el bosque de Sobroso, donde la vida se abre paso en cada rincón.